El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ha presidido la sesión del Consejo de Seguridad de la ONU en la que México asume la presidencia mensual del mismo. En su segunda visita al extranjero en la sede del organismo en Nueva York, junto con el secretario general de la ONU, el portugués Antonio Guterres, en el sancta sanctórum del organismo internacional y, en una breve alocución, ha propuesto un plan global de lucha contra la pobreza con el objetivo de permitir una “vida digna“ para 750 millones de personas que viven con menos de dos dólares al día, financiado en buena parte por las personas y corporaciones más ricas, haciendo declaraciones participando de la mesa dedicada a la exclusión, desigualdad y conflictos, el primero de los 3 eventos que México encabezará como presidente temporario del Consejo hasta finales de noviembre.
«No vengo a hablar de seguridad como sinónimo de poderío militar ni como argumento para el empleo de la fuerza, mi planteamiento se basa en lo que postula Roosevelt cuando se creó la ONU: El derecho a una vida libre de temores y miseria y el principal obstáculo es la corrupción en todas sus expresiones», dijo AMLO al inicio de su ponencia.
Programa Mundial por la Fraternidad y el Bienestar, aspira a recaudar “un billón de dólares” a través de tres principales fuentes de ingresos: la contribución voluntaria anual del 4% de las mil mayores fortunas del mundo; otra aportación similar de las mil empresas más grandes, y un 0,2% del PIB de cada uno de los países miembros del G20, detalló AMLO en su alocución. México expondrá con más detalle el contenido de la ambiciosa iniciativa en una próxima reunión de la Asamblea General del organismo «Nunca en la historia de esta organización se ha hecho algo realmente sustancial para el beneficio de los pobres». – añadió Andrés Manuel.
De igual manera se calificó de “fracaso doloroso y absoluto” el hecho de que Covax, la plataforma global que lidera la ONU, haya distribuido sólo un 6% de las vacunas contra la Covid en el mundo, a su parte, indicó que la corrupción es el primer obstáculo para alcanzar “una vida libre de miedo y miseria, que es la base más sólida para la seguridad de todas las sociedades y naciones”. AMLO remachó su discurso con críticas “al estilo de vida lujoso y frívolo de las élites”.
Andrés Manuel, tiene entre otros un objetivo clave: el control de las armas ligeras en todo el mundo. Se trata de un empeño con evidente lectura interna, pues erradicar el tráfico ilícito de armas pequeñas y ligeras, que terminan en manos de los cárteles de la droga, es una prioridad del Gobierno mexicano, pues identificó a la corrupción como el principal problema mundial y dijo que de ella se deriva la decadencia que atraviesa el planeta. «Nunca antes se había acumulado tanto dinero en tan pocas manos», dijo el presidente, quien criticó al «modelo neoliberal» por socializar pérdidas y privatizar ganancias.
AMLO mencionó los programas sociales llevados adelante en su gobierno para ayudar a los jóvenes y que no caigan en la delincuencia, y tal como lo hiciera con el presidente Biden, sugirió que se apliquen esas iniciativas en Centroamérica para frenar la migración. «Las acciones fundamentales no son las coercitivas», afirmó.
Finalizando por hablar y señalar de ejemplo al programa Sembrando Vida, que ya había señalado como la supuesta inspiración de las iniciativas de reforestación de la COP 26, dijo que de aplicarse en Guatemala, Honduras y El Salvador «unas 330 mil personas que están en riesgo de emigrar» se quedarían en sus países.
Redactado por: Hipólito Martínez, Vianney
Estudiante de Relaciones Internacionales
Los artículos y columnas publicadas, son responsabilidad de sus autores y no reflejan necesariamente el punto de vista de DOMINIO POLÍTICO.