Lo que pasó la madrugada del sábado 29 de abril, es un hecho que pocas veces se ha visto en la historia del país, no por la rapidez, sino por la ignorancia de su desarrollo y contenido.
Se aprobaron veinte leyes, sin revisión ni discusión alguna, en un periodo de cinco horas entre la noche del viernes y la madrugada del sábado, entre las que destacan la aerolínea del Ejército, el fideicomiso turístico operado por los militares, la operación indefinida del Tren Maya por los soldados, la extinción del fallido INSABI y la Ley de Ciencia.
No había quórum y entonces, ahora sí y como pocas veces se ha visto a los senadores, se pusieron a “chambear”, presionando a una senadora que estaba en un viaje de trabajo en Bélgica para que pidiera licencia e inmediatamente asumiera el cargo su suplente, para así, lograr el quórum necesario y empezar el maratón porque les urgía tomar su puente de este lunes.
Así, en algo insólito, se aprobaron 20 leyes que ni los propios senadores de Morena y el Partido Verde saben de su contenido, solamente saben que tenían que aprobarlas por órdenes del inquilino de Palacio Nacional. Mientras tanto la oposición, PAN, PRI, PRD y Movimiento Ciudadano, en calidad de indignados ya mencionaron que van a impugnar la sesión y los dictámenes aprobados, para que se revise con lupa, llamando a este viernes “la noche negra”, el nombre lo dice todo.
El Grupo Plural, adelantó que con excepción de la Ley 3 de 3 y la desaparición del INSABI, pedirán a la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) revise estas violaciones; Alejandro Armenta, presidente de la Mesa Directiva del Senado, rechazó las versiones sobre la falta de quórum y otras presuntas irregularidades durante la votación y bueno, ya sabemos, todo en pro de la 4T.
Lo cierto es que lo ocurrido la semana pasada es un claro ejemplo de que la ignorancia nos gobierna, empezando por la Cámara de Diputados, porque (de manera ignorante), porque la mayoría de los legisladores no sabían qué estaban votando, lo hicieron, ya que ninguno tuvo tiempo suficiente de leer las mencionadas leyes.
Después y para rematar la Cámara de Senadores, rebasó cualquier expectativa, donde se suponía que se respetarían tiempos y procedimientos legislativos, incluso teniendo acordado ya un nombramiento para destrabar al INAI y pues nada, eso no se realizó y terminaron desechando el acuerdo para no validar los resultados.
Y de Andrés Manuel, no podíamos esperar una mejor respuesta a tan hábiles senadores, ya que esta mañana durante su matutina, mencionó que los de antes eran peores, por aprobar reformas como la energética. En fin, en unos días empezaremos a ver los resultados del fast track.