De acuerdo con la jefa del Servicio de Administración Tributaria (SAT), Raquel Buenrostro, será en tres meses cuando se presentará la reforma que en realidad sería una miscelánea fiscal junto con el Paquete Económico 2022, por lo que no “tocaría” a los trabajadores asalariados ni aumentará impuestos, así lo reveló el lunes 14 de junio.
Este martes, el presidente López Obrador aseguró que el Ejecutivo no promoverá “de ninguna manera” alguna reforma al Congreso para aumentar los impuestos.
“Que no se vaya a confundir nadie, no va a haber impuestos”, insistió durante su tradicional conferencia mañanera.
La Reforma Fiscal se enfocará en los grandes contribuyentes plenamente identificados por el SAT, que, por años, han incumplido con el pago de impuestos que les corresponde.
Y es que, de acuerdo con Raquel Buenrostro, la mitad de los impuestos no entregados al fisco provienen de este grupo, por lo que la cifra asciende a un billón 400 mil millones de pesos, lo que equivale a una quinta parte del gasto público de este año, aproximadamente.
La manera en cómo logran evadir estos montos, es utilizando deducciones indebidas y planeaciones fiscales e interpretaciones legales agresivas.
La tasa efectiva del Impuesto sobre la Renta (ISR) a grandes contribuyentes fue de 1.3% durante el 2020, porcentaje menor que el ISR a personas físicas que fue 25.4%, mientras que el gravamen para sueldos y salarios fue de 1.4%.
Es por eso por lo que esta reforma se ve como una especie de “justicia fiscal” en donde todos los contribuyentes deberán pagar lo que les corresponde acorde a sus ingresos.
De acuerdo con el Servicio de Administración Tributaria, este año se presentaron 10,154 declaraciones anuales de grandes contribuyentes, que en total pagaron 498,063 millones de pesos correspondientes al ejercicio fiscal de 2020, con una tasa media de 1.33%. Lo que, en promedio, representaría un pago de 49 millones de pesos de impuestos.
Sin embargo, estas instituciones obtuvieron alrededor de 3,684 millones de pesos de ingresos acumulables en promedio por cada contribuyente.
Es por eso que el SAT se está concentrando en este grupo de contribuyentes que aportan el mayor porcentaje de ingresos, con lo que espera una recaudación adicional de alrededor de 200 mil millones de pesos por año.
Las tasas efectivas del Impuesto Sobre la renta (ISR) serán aplicables a grandes contribuyentes en 40 ramas de la actividad económica, con lo que se pretende tapar el hueco de 700 mil millones de pesos provenientes de evasión y elusión fiscal, monto que representa 3% del Producto Interno Bruto (PIB).
Asimismo, hay una meta en el área de comercio exterior del SAT que el año pasado, por la pandemia, se cayó la recaudación en 15.6% en términos reales. Por ello, instó a las aduanas a que deben de recuperar al menos 150,000 millones de pesos perdidos.
Pero otro gran grupo evasor de impuestos es la economía informal, por lo que a la postre también deberá pagar su carga impositiva. Y es que de acuerdo con estimaciones recientes de EY y Mastercard, en México la economía informal se basa en el efectivo, que representa el 19.2% del PIB. Lo que significa que el tamaño de las actividades económicas que están ocultas del escrutinio de las autoridades o que no tienen registro, es de cerca de 4.6 billones de pesos anuales, basándonos en el tamaño de la economía en 2019.
La pérdida de recaudación fiscal derivada de la existencia de una economía informal basada en el uso de efectivo representa el 2.6% del PIB, es decir, cerca de 620,500 millones de pesos. Esta cifra es equivalente al 10% del Presupuesto de Egresos de la Federación 2021.
De esta manera, con esta Reforma Fiscal, todos estarán obligados a pagar sus impuestos, sin afectar a los “mismos de siempre”.