Hemos escuchado hablar infinidad de veces sobre la Reforma Electoral que propone el Presidente López Obrador, la cual traerá grandes beneficios para México.
En esta columna quiero recalcar algo importante. México cuenta con la democracia más cara del mundo. ¡Sí!, es una realidad. El costo por votante es de 25 dólares promedio; es decir, si hacemos la conversión a pesos mexicanos, un voto nos cuesta 485 pesos. en Rusia es de menos de la mitad de un dólar, a ellos le cuesta solamente 8.52 dólares. Entonces si hablamos de que el costo por campaña es de 1,923 millones de dólares y el número de electores son 76 millones aproximadamente, estamos hablando que el total que el INE desembolsaría serían 36 mil 860 millones de pesos.
Tenemos la democracia mas cara del mudo, incluso comparándonos con países donde el número de votantes es dos o tres veces mayor y esto a pesar de que los procesos electorales tanto en 1988 hasta 2012 han sido duramente cuestionados.
Por eso, la idea de la Reforma Electoral NO es desaparecer al Instituto Nacional Electoral sino transformarlo y reformarlo a INEC (Instituto Nacional de Elecciones y Consultas), pues aparte de organizar las elecciones en las 32 entidades federativas, será el encargado de propiciar un ambiente democrático y transparente en las Consultas Populares, las cuales ya son un derecho ciudadano estipulado en el artículo 35 de nuestra Carta Magna. Otra de las aportaciones de esta Reforma Electoral es la reducción del presupuesto a partidos políticos. Se propone eliminar el financiamiento ordinario y que los partidos cubran ese gasto mediante aportaciones de sus simpatizantes y militantes. Este financiamiento se obtendrá exclusivamente en tiempos de campaña electoral.
No podemos desperdiciar esta gran oportunidad que nos brinda el Presidente López Obrador.
Vale la pena salvar la democracia, pero con legitimidad, eficiencia, transparencia y credibilidad, donde la decisión de los ciudadanos sea respetada y acatada.
Patricia González Miranda. Presidenta de Que Siga La Democracia Querétaro
Los artículos y columnas publicadas, son responsabilidad de sus autores y no reflejan necesariamente el punto de vista de DOMINIO POLÍTICO