Ya huele a proceso electoral querido lector (a), y eso que estamos exactamente a ocho meses de la elección del 2024 y en estos aromas que se desprenden de manera muy natural, ya huele a primo rico y a primo pobre, o al menos eso dice Alejandro Armenta Mier, dejando claro que él es el primo pobre y qué bueno que lo aclara, luego hay malos entendidos o se podría pensar que es un primo rico con los lujos que se dan o daban sus hoy ex asesores.
Previo a la sesión que se realizó este sábado, donde los votos de Morena favorecieron a Ignacio Mier Velazco, Armenta Mier bromeó con el parentesco familiar que los une, pues dijo que “como en toda familia hay primos ricos y primos pobres, y él por supuesto es de los pobres”. Aunque el presupuesto en cuanto a espectaculares demuestren que ninguno de los dos son muy austeros que digamos, no quieran explicar lo inexplicable, faltaba más…
Después de que se diera a conocer el resultado del Consejo Estatal de Morena donde Ignacio Mier Velazco, fue apoyado por 44 consejeros y en el que Alejandro Armenta solo obtuvo 6, a muchos, les quedó claro que en efecto, es el primo pobre, aunque esto solo aplique a números locales del partido guinda, porque en números del Consejo Nacional, seguramente saldrá muy enriquecido, que es lo que lo hace mantener la cordura.
Mientras que en el caso del pariente rico, presume orgulloso sus cifras; le apuesta a las encuestadoras privadas, esas que cobran mucho para publicarlos “punteros” y haciendo una sinopsis de lo que según ellas será la próxima jornada electoral. Como dice el dicho, “no niega la cruz de su parroquia”, una cruz que viene cargada de compromisos y mucho dinero, total que para eso es el rico de la familia.
Por Martha Berra