La diputada María Rosete (PT) propuso reformar diversas disposiciones del Código Civil Federal para establecer un lenguaje incluyente en este ordenamiento legal, a fin de promover la igualdad de género y reconocer la diversidad.
La iniciativa, que modifica los artículos 2, 146, 147, 168, 172, 177, 216, 217, 218 y 1665 de dicho Código, fue turnada a la Comisión de Justicia para dictamen, con opinión de la Comisión de Diversidad. Sustituye los términos de “el hombre y la mujer” por el de “todas las personas”. Reemplaza las palabras “el marido y la mujer” por “los cónyuges”.
Además, define al matrimonio como “la unión libre de dos personas para realizar la comunidad de vida, en donde ambos se procuran respeto, igualdad y ayuda mutua”.
Propone derogar el artículo 158, el cual actualmente señala que: “La mujer no puede contraer nuevo matrimonio sino hasta pasados 300 días después de la disolución del anterior, a menos que dentro de ese plazo diere a luz un hijo. En los casos de nulidad o de divorcio, puede contarse este tiempo desde que se interrumpió la cohabitación”.
El objetivo de la iniciativa es el uso de un lenguaje que refleje y promueva la igualdad de género y el reconocimiento de la diversidad, y erradique estructuras lingüísticas que por años han perpetuado estereotipos de género y excluido a las personas cuya identidad de género no se ajusta a las categorías binarias de hombre y mujer, expone.
Asimismo, hacer efectivos no sólo los derechos civiles de todas las personas, sino la libertad de determinar sus proyectos de vida y garantizar su plena realización, al fortalecer la noción de igualdad de derechos.
Refiere que la Comisión Nacional de los Derechos Humanos ha emitido recomendaciones que buscan promover relaciones igualitarias e inclusivas y ha exhortado a los diversos estados a armonizar sus códigos para garantizar el pleno acceso a los derechos humanos.