Arrancamos la semana con la noticia de que Santiago Creel recapacitó y decidió retirarse de entre los aspirantes a la candidatura por el Frente Amplio por México, esto nos traduce en automático a que efectivamente estaremos viendo una candidata a la presidencia de nuestro país.
En este caso hay dos mujeres muy experimentadas desde sus respectivos partidos políticos; por una parte tenemos a Beatriz Paredes del Partido Revolucionario Institucional (PRI), y por otra a Xóchitl Gálvez del Partido Acción Nacional (PAN), que si bien las une la misma causa, las diferencias entre ambas son muy notorias, pues la primera representa a la fuerza política y la segunda a la fuerza social.
Partiendo de esas diferencias y en el caso de Beatriz Paredes, el problema es que su institución política no goza del mejor entorno, si bien hay que reconocer que la estructura política del PRI es sólida, socialmente ya no representa una fuerza electoral.
En el caso de Xóchitl Gálvez, se nota el ánimo social que podría darle batalla a Claudia Sheinbaum, pues ha logrado irrumpir en el ánimo del presidente Andrés Manuel López Obrador y sobretodo, es la mejor opción para representar a la oposición en las urnas.
Desde mi punto de vista, el Frente Amplio por México, en este momento marca diferencia con Morena y lo está posicionando, esto al estar en unión entre simpatizantes y al decidir quién es su mejor opción. Porque siendo honestos, a ninguno de los partidos que componen el Frente Amplio les alcanza si decidieran ir solos, o si empiezan a rasgarse las vestiduras, así que alineados todos, podrían alcanzar buenos resultados y grandes sorpresas.
Martha Berra.
