El INEGI presento el indicador oportuno de la actividad económica (IOAE), esta es una estimación anticipada sobre el desempeño económico de México. Estos datos calcularon que al cierre del mes de marzo la economía cayó -2.1 %, respecto a marzo del 2020. Se dió a conocer que las actividades secundarias y terciarias sufrieron una reducción del -0.9% y -3.1%.
Estos resultados no sustituyen los datos del Indicador Global de Actividad Económica (IGAE), los datos del IOAE sirven para complementar la información.
Mientras tanto el presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), Carlos Salazar considera que es factible que la economía crezca a tasas cercanas al 5% este año, siempre que se ataque la baja inversión que se ha reportado en los últimos años.
Asegura que el gran talón de Aquiles sigue siendo la inversión la cual esta negativa, debido a la incertidumbre en las leyes al sector energético, eléctrico e hidrocarburos, el tercer plan de infraestructura que pactan entre el sector publico y privado tuvo que ser modificado, pues ya no se contendrá proyectos en estos rubros
Salazar comentó, que seguirá insistiendo desde el CCE en la variable de la inversión y que, si no hay condiciones jurídicas, la inyección de capitales seguirá cayendo y entonces el crecimiento del PIB dependerá del Sector Externo y del Consumo, lo cual no sostiene al crecimiento de largo plazo.
Mientras tanto el FMI advirtió que los países de América Latina deben de controlar la emergencia del Covid-19, esto con el propósito de que las economías avancen a la par del resto del mundo.
El director del FMI para el hemisferio occidental Alejandro Werner, señaló que es muy importante garantizar los recursos. Indicó que las nuevas olas de covid-19 registradas en distintos países de la región dificultan la recuperación económica.
Detalló que los gobiernos que puedan deberían seguir gastando y mantener bajos los costos de los préstamos, mientras que los países con escasez de efectivo deberían de centrar el gasto en la atención médica y en el apoyo a los hogares.
El repunte de las exportaciones mexicanas encabezó el resurgimiento del sector manufacturero en la región, mientras que el turismo se ha quedado atrás. Por otra parte, el mercado laboral sigue estando frágil, “los trabajadores poco calificados, perdieron más empleos o tuvieron que recortar las horas de trabajo incluso cuando pudieron mantener el empleo, sufriendo las mayores pérdidas de ingresos” concluyo.