¿Qué está pasando en México con las campañas electorales?
Tres, dos, uno y arrancan; estamos en medio de las elecciones a nivel nacional y se disputan la gubernatura los estados de Aguascalientes, Durango, Hidalgo, Oaxaca, Quintana Roo y Tamaulipas. Pero eso no es lo más importante, lo verdaderamente destacable es el tipo de comunicación digital que todas y todos están haciendo en este proceso electoral.
Parece que los estrategas electorales siguen usando cassettes o CDs para un reproductor de música que sólo soporta mp3 o nfts. Es decir y traducido al español, siguen haciendo campañas “a la antigua”. En una realidad, donde el electorado ya no es el ciudadano que se sienta frente al televisor a consumir todo lo que se le brinda. Si no que hoy estamos ante electores más exigentes, con mayor juicio y exageradamente críticos, los bautizados como: “Ciudadanos Digitales”.
En México la red social más utilizada es el “WhatsApp”, le sigue “Facebook”, “Instagram” y hasta el final (por lo pronto) “TikTok”. Las primeras tres pertenecientes al consorcio de META y todos funcionando bajo complicados algoritmos que predicen el comportamiento humano del consumidor. Que por cierto es el mismo elector que llenará las urnas en el próximo “Día D”.
Así como las redes sociales que hoy utilizamos funcionan con funciones predictivas, también las campañas electorales tienen una gran área de oportunidad con la utilización del “Neuromarketing”. Esta ciencia que, a través de colores, estímulos visuales, líneas y palabras, puede predecir comportamientos y sentimientos en el mercado electoral. Y que ya se ha utilizado en varias partes de América del Norte y Europa.
Estamos en el 2022, tenemos un metaverso a la vuelta de la esquina y no es posible consumir a candidatas o candidatos con la clásica foto sonriendo a la nada y su nombre por un lado, la gente ya no quiere consumir “políticos antiguos”; necesitamos más campañas empáticas y que conecten con el sentimiento ciudadano.
¿Veremos la utilización del Neuromarketing en este proceso electoral en México?
¡Nos leemos en la próxima!.
Los artículos y columnas publicadas, son responsabilidad de sus autores y no reflejan necesariamente el punto de vista de DOMINIO POLÍTICO
