Ha terminado la precampaña y queda claro que Claudia Sheinbaum no tiene competencia, cierra con más de 20 puntos de ventaja frente a sus opositores. El pasado 18 de enero vimos una movilización histórica para este momento electoral. En el Monumento a la Revolución y ante más de 150 mil personas resonó la voz de la mujer que estará a cargo de continuar con los trabajos de la Cuarta Transformación.
Su discurso fue contundente, enalteciendo la unidad y fortaleza del movimiento, reconociendo que son los principios los que lo cohesionan y la convicción de llevar bienestar a todo el pueblo de México. Resaltó que la democracia como forma de vida y de enseñanza es la reivindicación y la bandera del humanismo mexicano.
Criticó la forma en que la oposición pregona sobre libertad aun cuando tienen un historial manchado de sangre. Hizo memoria sobre la represión del 68, las desapariciones forzadas, la marginación y falta de oportunidades que hubo en épocas del PRIAN. Y advirtió que la libertad sólo puede ejercerse en un régimen democrático y basado en garantizar plenos derechos para todas las personas.
El triunfo de la Dra. Claudia es inminente y el viejo régimen lo sabe. Por tal motivo su candidata se mostró provocadora en días recientes, lo están intentando todo. Vimos a una Xóchitl Gálvez retar a debate y aferrarse a la narrativa machista que se han empeñado en levantar, pero que poco resuena en la gente, puesto que ya no son tiempos de insinuar que una mujer no puede pensar y actuar por sí misma.
Gálvez ejerce violencia cuando refiere que la exjefa de gobierno necesita permiso del Presidente para tomar decisiones. Pero es un discurso tan rancio como los partidos que representa. El machismo no tiene género, otras mujeres también pueden reproducirlo y es lastimoso que una mujer que se intenta vender como liberal y en contra de la violencia de género abrace esta dinámica misógina. Pero a nadie sorprende.
La virtual candidata de la oposición ha forjado su carrera política con base en ocurrencias y formas desesperadas de llamar la atención. Cómo olvidar cuando asistió con botarga de dinosaurio al pleno del Senado o cuando hizo una pijamada junto con otros innombrables del PAN. Ahora se quiere poner con Sansón a las patadas y no le alcanza.
Encuestas publicadas por el Financiero y recogidas por EFE, muestran a Sheinbaum como clara favorita con el 52% de los votos, a Gálvez con el 30% y a Álvarez con un 7 %. De las Heras Demotecnia predice que en caso de que las elecciones se llevaran a cabo en este momento, habría un 45 por ciento de participación electoral y Claudia Sheinbaum ganaría 63% de los votos, es decir un total de 27 millones 575 mil 684 votos.
Ni todo el circo, las calumnias, ni los ataques machistas cambiarán el rumbo de las elecciones. Ya lo dijo la Dra. Claudia Sheinbaum: “No por mucho provocar se crece en las encuestas”.
Por Mtra. Gabriela Jiménez Godoy, activista social y militante de MORENA
Twitter: @GabyJimenezMX Facebook: GabyJimenezGo
